Aumentan las evacuaciones con nuevo incendio fuera de control en California
Cientos de hogares tienen orden de evacuación en el centro de California debido al descontrolado avance de un nuevo incendio forestal que se desató el jueves en ese estado, a medida que una peligrosa ola de calor azota a buena parte de Estados Unidos.
En momentos en que los miles de bomberos combaten múltiples focos ígneos en California (oeste), más de 340 hectáreas de vegetación fueron consumidas hasta este viernes por el incendio French en el condado de Mariposa, cerca del Parque Nacional Yosemite.
Casi toda la comunidad de Mariposa, del condado homónimo y de poco más de 1,000 habitantes, tenía orden de evacuación este viernes, mientras que el resto se encontraba bajo alerta roja.
Más al norte, a pocos kilómetros de Sacramento -capital del estado-, los más de 2,000 bomberos que combaten el incendio Thompson consiguieron controlar parcialmente las llamas, que consumieron unas 1,533 hectáreas de vegetación y bosques en Oroville.
Aunque las autoridades dieron marcha atrás con las evacuaciones de algunas zonas de esa localidad del condado de Butte, las advertencias continúan en pie para buena parte de la población.
Algunas regiones registraron nuevos récords de calor y las autoridades advirtieron que lo peor aún está por venir, con pronósticos por encima de los 40ºC para los próximos días.
«Las temperaturas aumentarán algunos grados en comparación con los picos de ayer y mañana debe ser el día más caliente de la ola de calor que seguirá impactando al menos al comienzo de la semana que viene», alertó en las redes el Servicio Meteorológico Nacional este viernes.
En este sentido, exhortaron a la población a evitar el uso de fuegos artificiales, como los utilizados tradicionales de la conmemoración del feriado de 4 de Julio, día de la Independencia de Estados Unidos y que iluminaron el cielo de ciudades como Los Ángeles el jueves.
California vive un temprano inicio de lo que parece ser una intensa temporada de incendios forestales.
Actualmente, más de diez incendios están activos en el estado, carbonizando cientos de hectáreas.
California sufrió unos 20 años de sequía dramática, pero los dos últimos años fueron relativamente húmedos, con altos niveles de lluvia que rellenaron los embalses y permitieron que bosques y pastizales crecieran.
Sin embargo, el 2024 se perfila como un año caluroso y seco, y esa flora se está secando rápidamente, convirtiéndose en elemento combustible para los incendios forestales.
Los eventos climáticos extremos se han vuelto cada vez más comunes gracias al calentamiento global, según los expertos, en gran parte por la quema indiscriminada de combustibles fósiles.