Chile amplía el estado de emergencia para extender la custodia militar más allá de las carreteras

El gobierno del presidente chileno, Gabriel Boric, modificó el decreto de estado de emergencia en dos regiones del sur afectadas por la violencia para permitir que los militares a cargo del orden público puedan llegar a lugares que tenían vedados y extenderse más allá de las carreteras, informó el martes la ministra del Interior, Carolina Tohá.

El estado de emergencia, que completó un año de vigencia, rige en toda la región de La Araucanía y en dos provincias del Biobío, unos 600 kilómetros al sur de la capital chilena, donde grupos indígenas minoritarios exigen la restitución de tierras ancestrales mediante atentados terroristas.

Tohá explicó al Senado que el «recrudecimiento de los hechos violentos» y cambios en la modalidad de los atentados, llevaron al gobierno a modificar el decreto que establecía que los militares debían vigilar las carreteras y asegurar el libre tránsito en las rutas. Agregó que el cambio es «para evitar cualquier tipo de interpretación restrictiva».

Tras escuchar los cambios, el Senado prorrogó una vez más el estado de emergencia y se espera que ahora se pronuncien los diputados. Muchos en el Congreso y dirigentes gremiales del sur presionaban desde hace tiempo para que el estado de excepción no estuviese acotado.

Tohá explicó esta semana que en la zona hay un recrudecimiento de las acciones violentas «y de un tipo especialmente escabroso», dijo en alusión a la reciente quema de una escuela de una comunidad indígena.

Cifras de la Fiscalía de La Araucanía indican que entre el 1 de enero y el 14 de mayo se han registrado 239 actos de violencia rural, cantidad similar a todos los ocurridos el año pasado.