¿Cómo debe desarrollarse la liberación de rehenes israelíes y prisioneros palestinos?
La tregua entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza entró en vigor este viernes por la mañana y debe llevar a la liberación de 13 rehenes por la tarde, en los primeros signos de distensión tras semanas de guerra. El acuerdo prevé la liberación de 50 rehenes, algo más de diez al día, a cambio de una tregua de cuatro días, la liberación de 150 detenidos palestinos y un aumento de la ayuda humanitaria al sur de la Franja de Gaza.
«Las familias de los 13 rehenes que serán liberados hoy han sido informadas», explica Michel Paul, corresponsal de RFI en Jerusalén. La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el jueves que tenía una «lista inicial de nombres» de rehenes y que estaba en contacto con sus familias. Si todo va bien, estos rehenes, mujeres y niños, serán entregados a la Cruz Roja en Gaza y exfiltrados del enclave palestino por el sur, el paso fronterizo de Rafah, donde serán recibidos por un equipo israelí.
Tras ser embarcados en un avión en El-Arish, serán trasladados a hospitales israelíes. Se han tomado medidas especiales para acogerlos, que incluyen reuniones con sus familias, un interrogatorio de seguridad y atención psicológica. No hay que olvidar que algunos de ellos conocerán el trágico destino de sus seres queridos.
En cuanto a los 50 detenidos palestinos que serán liberados hoy, esto tendrá lugar en Jerusalén. Serán recibidos e identificados por la Cruz Roja y un equipo egipcio. Cabe señalar que casi todos estos detenidos, mujeres y menores, proceden de Cisjordania y Jerusalén Este. Israel difundió una lista de 300 prisioneros palestinos que pueden ser excarcelados: 33 mujeres y 267 menores de 19 años.
Violaciones menores de la tregua
«Ambas partes informaron de algunas violaciones de la tregua durante los primeros 15 minutos de la tregua«, señala Sami Boukhelifa, nuestro corresponsal en Jerusalén. Pero desde entonces, los drones de inteligencia israelíes han abandonado los cielos de Gaza. Y ya no hay bombardeos ni fuego de artillería. A diferencia de anoche, cuando llovieron bombas sobre el norte de Gaza. «Fue una de las peores desde el comienzo de la guerra», dicen testigos sobre el terreno. Y esta mañana, una lluvia de octavillas ha caído sobre el enclave palestino. Escritas en árabe, los aviones israelíes las lanzan a millares. En ellas se lee: «La guerra no ha terminado. Esta tregua humanitaria es temporal. El norte de Gaza es una zona de guerra. Está prohibido entrar. Por su propia seguridad, permanezcan en el sur».