Domestika prepara un ERE para el 45% de su plantilla en España. Su justificación: ChatGPT y la IA
Domestika pasa a engrosar la larga y cada vez más nutrida lista de empresas tecnológicas que han decidido dar un tijeretazo a su plantilla. En su caso, eso sí, con un trasfondo especial. La compañía ha decidido prescindir de 89 empleados en España alegando motivos económicos, organizativos y de producción, pero en la ecuación las inteligencias artificiales (IA) generativas, como ChatGPT, tendrían un peso relevante: al menos una parte de los trabajadores despedidos verán cómo las tareas que desempeñaban hasta ahora pasarán a automatizarse gracias a estas herramientas. O al menos esa es la idea que sostiene la empresa.
La noticia la ha avanzado La Vanguardia, que asegura que la compañía estadounidense especializada en formación online está negociando un ERE con su filial madrileña, Dmstk SL, que afectará a 89 trabajadores. La firma emplea a 198 personas, con lo que el «tijeretazo» sería considerable: lo sufriría casi el 45% de la plantilla. El recorte no alcanzaría a la filial dedicada a la producción de contenido, que el año pasado ya se vio afectada —junto a la de formación— por un ajuste de personal que se saldó con aproximadamente un centenar de despidos.
Los representantes de los trabajadores aseguran que la IA ha jugado un papel clave: «El contexto macroeconómico actual está provocando recortes en todo el sector tecnológico, pero nosotros también estamos directamente perjudicados por la automatización de procesos de las nuevas aplicaciones de IA, como ChatGPT».
La ley es bastante clara al abordar la figura del ERE y establece que los despidos deben estar justificado por ciertas causas —definidas en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores—, principalmente de tipo económico, técnico, organizativo o de producción. Entre las razones se citan «cambios en los medios o instrumentos de producción o […] sistemas y métodos de trabajo del personal”.
Al menos una parte de los empleados que perderán su empleo en Domestika estarían afectados por el desarrollo de nuevos recursos de IA. La Vanguardia cita en concreto a 22 empleados del servicio de traducción, labor que asumirán apps automáticas, y 9 dedicados a la creación de contenido de marketing que realizan labores que empezará a asumir también una inteligencia artificial generativa. Otras 2 personas verían mejorada su situación al pasar a supervisar material.
La decisión tiene en realidad poco de sorprendente.
Hace poco la propia OpenAI, desarrolladora de ChatGPT, elaboró un informe en el que valoraba qué impacto podría tener sus chatbots y los modelos Generative Pre-trained Transformer (GPT) en el mercado laboral. Sus análisis se centró en EEUU, pero dejó conclusiones relevantes: cerca del 80% de la mano de obra del país era susceptible de ver afectadas por GTPT al menos el 10% de sus tareas laborales.
Es más, alrededor del 19% de los trabajadores podría encontrarse con que la IA influía de un modo u otro en al menos la mitad de sus funciones. Los empleos con más bazas de verse expuestos son además aquellos con mayor retribución.
El recorte llega también después de que otras empresas del sector tecnológico, incluidas BigTech, hayan anunciado a lo largo de los últimos meses importantes ajustes. Y para muestra, un botón: Meta prescindirá de 10.000 personas, lo que se añade al anuncio de 11.000 despidos lanzado en noviembre; Google ha despachado a 12.000 empleados, Microsoft a 10.000, Salesforce a 8.000 y Amazon encara una senda similar tras haber anunciado un recorte notable hace meses.