El macabro tráfico de huesos humanos en México, un negocio floreciente

MEXICO- El tráfico de huesos humanos en cementerios de la capital de México se convirtió en un negocio floreciente en el cual participan santeros y brujos que los usan para practicar rituales, pero también estudiantes de medicina y odontología para aprender anatomía y realizar prácticas forenses.

El macabro mercado de restos humanos extraídos ilegalmente de los panteones capitalinos, aprovechando la escasa vigilancia y su marcado deterioro, salió a la luz luego del escalofriante caso reciente del robo del cuerpo de un bebé de tres meses, de una tumba en el oriente de la ciudad y llevado a una prisión a unos 100 kilómetros de distancia.

El cadáver fue finalmente hallado en el depósito de basura de la cárcel, generando un escándalo mediático que obligó al despido y arresto de 19 empleados de la prisión de San Miguel, en el estado de Puebla, vecino a la capital y del administrador del cementerio de San Lorenzo Tezonco, en la alcaldía de Iztapalapa, oriente de la Ciudad de México.

Sólo una mujer ajena a la cárcel fue detenida por el caso, por haber ingresado el cadáver a la prisión, pero hasta ahora todavía no queda claro si lo hizo para introducir droga o para hacer un ritual.

Los precios

Según un reportaje de la cadena Televisa, traficantes de huesos humanos llegan a cobrar desde 200 pesos (unos 10 dólares) por un dedo, hasta 35.000 (unos 1.750 dólares) por un esqueleto completo.

Para facilitar las entregas y evitar la mano de la justicia, los comerciantes de despojos humanos los envían a través de taxis de aplicación.

A raíz del caso del pequeño «Tadeo», como se le conoce al bebé robado de una tumba en la capital mexicana, surgieron diversas historias de quienes han sufrido el robo de esqueletos completos o fragmentos de huesos de sus familiares sepultados en diversos cementerios.

La televisora logró grabar en video en forma secreta a dos vendedores sólo identificados como David y su hermana Elizabeth, que entregaron al reportero en una valija cinco cráneos humanos en un barrio popular de la alcaldía Iztacalco, al norte de la capital, exhumados del panteón civil de San Lorenzo Tezonco.

 

FUENTE AGENDA 56