Gobierno de Israel enfrenta presiones en varios frentes por guerra en Gaza

El ejército israelí sigue librando intensos combates en la Franja de Gaza. Este 19 de diciembre se votará en el Consejo de Seguridad de la ONU un proyecto de resolución que pide un «cese urgente y duradero de las hostilidades» en el enclave palestino. Israel se enfrenta a peticiones cada vez más insistentes de alto el fuego por parte de la comunidad internacional.

Washington otorga a Israel hasta fin de mes para concluir con el operativo militar terrestre en Gaza y Europa está perdiendo la paciencia, principalmente afectada por las amenazas al comercio internacional en el Mar Rojo y el Golfo de Adén, debido a los ataques contra buques de transporte de las milicias hutíes apoyadas por Irán desde el Yemen.

Presiones internacionales e internas

Las imágenes de devastación transmitidas desde la Franja de Gaza y la difícil situación humanitaria vivida allí por más de dos millones de personas son también motivos de presiones internacionales que se ejercen directamente sobre el gobierno israelí.

Por otra parte, el gabinete de guerra enfrenta fuertes presiones internas por parte de las familias de los secuestrados israelíes en Gaza, quienes cuentan con un gran apoyo popular y exigen que Israel haga todo lo necesario para lograr la libertad de sus queridos, lo cual implicaría la imposición de un cese de fuego prolongado y la liberación de miles de presos palestinos.

Comenzada la guerra después del ataque de Hamás contra la población civil israelí, el Gobierno de Benjamín Netanyahu se puso como objetivo aniquilar el poderío militar y la administración de Hamás en Gaza, además de la liberación de todos los secuestrados. Por ahora, Israel no cede a las presiones internacionales en vías al logro de esos objetivos.

Ataques en el Mar Rojo

El lunes, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, anunció la formación de una coalición de 10 naciones en el Mar Rojo para hacer frente a los repetidos ataques de milicias hutíes contra barcos que los rebeldes yemeníes consideran «vinculados a Israel«.

«Los países que buscan defender el principio fundamental de la libertad de navegación deben unirse para abordar el desafío planteado por este actor no estatal», aseguró Austin en un comunicado.

Esta alianza, según el ministro estadounidense, estará compuesta por Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Bahréin, Canadá, Italia, Países Bajos, Noruega, España y las islas Seychelles.