Haití: entender la cuestión del canal de riego en el río Masacre desde el punto de vista del derecho internacional

El río Masacre está en el centro de un conflicto abierto entre República Dominicana y Haití. El gobierno dominicano protesta desde 2021 contra la construcción de una toma en este río y ha decidido desde septiembre de 2023 tomar medidas de represalia contra el país y sus habitantes tras la decisión de organizaciones de la sociedad civil de reanudar la construcción de la obra. En este artículo veremos, a la luz de la ley, si las protestas y reclamos del partido dominicano son justos y fundamentados.

Veremos el estado del río Massacre, un curso de agua internacional, y los principios legales que guían la gestión y el uso de los recursos hídricos compartidos. Finalmente, centraremos nuestro análisis en los acuerdos bilaterales firmados entre ambos países que abordan el tema. Terminaremos formulando propuestas concretas para una solución pacífica del conflicto.

1. Contexto

En agosto de 2018, Haití inició la construcción de un sistema de riego, abastecido por las aguas del río Masacre con el doble objetivo de controlar sus inundaciones e irrigar más de 3.000 hectáreas de tierra en la llanura de Maribaroux. La empresa cubana DINVAI ejecuta la construcción del proyecto desde junio de 2019. Las características técnicas de la obra incluyen 2,6 kilómetros de canal que estará conectado a un antiguo canal colonial restaurado, el Trop Plein. El caudal de agua en el perímetro de riego será de 1,50 m3/s con válvulas de 1,50 m de ancho.

Este trabajo causó preocupación entre el Estado y ciertas organizaciones de la sociedad civil dominicana, particularmente grupos cercanos a la extrema derecha nacionalista antihaitiana. Los dominicos expresaron sus temores. Sostienen que la obra podría provocar una reducción en el caudal del río. También argumentan que puede suponer una amenaza para los ecosistemas acuáticos y terrestres situados aguas abajo.

Un primer incidente grave ocurrió el 26 de abril de 2021, soldados dominicanos del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) ingresaron a territorio haitiano para intimidar a los trabajadores y detener la obra. Para tratar de encontrar una solución concertada a esta situación, el 27 de abril tuvo lugar una primera reunión en la oficina del Gobernador de la provincia de Dajabón en presencia del Embajador de Haití en Santo Domingo, Profesor Smith Augustin. Participaron autoridades locales haitianas y dominicanas, organizaciones de la sociedad civil, funcionarios y técnicos de las administraciones locales. Esta reunión, sin embargo, no resolvió la disputa.