La acumulación de nubes provoca lluvias más extremas
Con un clima más cálido, los eventos de lluvia extrema en los trópicos aumentan en severidad más de lo esperable en teoría debido a que las nubes están más agrupadas, revela un nuevo modelo climático.
Las precipitaciones extremas son uno de los desastres naturales más dañinos, que cuestan vidas humanas y causan daños por miles de millones. Su frecuencia ha ido aumentando en los últimos años debido al calentamiento del clima.
Durante varias décadas, los científicos han estado utilizando modelos informáticos del clima de la Tierra para comprender mejor los mecanismos detrás de estos eventos y predecir tendencias futuras.
Con su nuevo modelo climático, los investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología de Austria (ISTA) y del Instituto Max-Planck de Meteorología, estudiaron cómo la agrupación de nubes y tormentas impacta los eventos de lluvia extrema, específicamente en los trópicos, con más detalle de lo que había sido posible antes. Los hallazgos se publican en Science Advances.
Este nuevo tipo de modelo con una resolución mucho más fina mostró que, con un clima más cálido, los eventos de lluvia extrema en los trópicos aumentan en severidad más de lo que se esperaba en teoría debido a que las nubes están más agrupadas.
Cuando las nubes están más agrupadas, llueve durante más tiempo, por lo que aumenta la cantidad total de lluvia.
También descubrieron que las lluvias más extremas en áreas de alta precipitación ocurren a costa de la expansión de las áreas secas, lo que supone un cambio adicional hacia patrones climáticos extremos.
Esto se debe a la forma en que se agrupan las nubes y las tormentas, algo que ahora es posible simular con este nuevo modelo climático.
Este nuevo modelo, propuesto por primera vez en 2019, simula el clima con una resolución mucho mayor que los anteriores.
Los modelos anteriores no podían tener en cuenta las nubes y las tormentas con tanto detalle, por lo que pasaban por alto gran parte de la compleja dinámica del movimiento del aire que crea las nubes y las hace congregarse para formar tormentas más intensas, aunque el modelo simula el mundo entero a la vez, los científicos centraron su análisis en la zona de los trópicos alrededor del ecuador.
Lo hicieron porque la formación de nubes y tormentas allí funciona de manera diferente que en otras latitudes.
Estos hallazgos se suman al creciente conjunto de evidencia que muestra que la formación de nubes a menor escala tiene un impacto crucial en los resultados del cambio climático.
Investigadores de todo el mundo están colaborando en la creación de modelos más detallados y realistas del clima mundial para comprender los efectos del cambio climático.
Los modelos climáticos dividen la atmósfera de la Tierra en porciones tridimensionales, cada una con sus propios datos sobre temperatura, presión, humedad y muchas más propiedades físicas.
Luego emplean ecuaciones físicas para simular cómo estos fragmentos interactúan y cambian con el tiempo para crear una representación del mundo real.
Como la potencia informática y el almacenamiento no son ilimitados, estos modelos deben introducir simplificaciones y los científicos trabajan continuamente para hacerlos más precisos.