El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dejó de lado el desfase horario internacional el sábado y voló directamente desde la cumbre del G7 en Italia hasta Los Ángeles para asistir a un evento de recaudación de fondos repleto de estrellas que traerá millones de dólares para su puja electoral contra Donald Trump en noviembre.
El presidente estuvo acompañado por el expresidente demócrata Barack Obama en un evento que incluyó la presencia de los actores Julia Roberts y George Clooney, así como de Barbra Streisand.
Rodeado de estrellas de Hollywood, Biden se tornó muy serio al referirse a su rival Trump, y dijo que quienquiera que gane las elecciones posiblemente tendrá que presentar al menos dos nuevas nominaciones a la Corte Suprema.
«Si es reelegido nominará otras dos banderas al revés», dijo Biden, refiriéndose al juez conservador en funciones que en 2021 tenía una bandera estadounidense invertida frente a sus casa, símbolo de las falsas afirmaciones de fraude electoral de Trump.
Trump, en un intento sin precedentes de volver a la Casa Blanca tras ser declarado culpable en un caso penal, también estuvo en campaña en Detroit, estado de Michigan, donde alardeó que su propia recaudación de fondos es «la más alta en la historia de la política».
Michigan es un estado que Biden debe ganar en las electorales de noviembre.
Con el objetivo de hacerse del apoyo electoral de los afroamericanos, Trump visitó una iglesia en Detroit, donde dijo a cientos de votantes que «el corrupto Joe Biden no ha hecho nada por ustedes excepto hablar».
Trump se dirigió luego a una convención de republicanos de extrema derecha de alto perfil y partidarios de su intento de anular las elecciones de 2020.
Allí, Trump criticó el paquete de protección climática de Biden, se burló del presidente ucraniano Volodimir Zelenski calificándolo de «vendedor» y renovó su retórica incendiaria sobre lo que califica de «invasión de inmigrantes de Biden«, diciendo que la detendrá con la mayor deportación en la historia de Estados Unidos.
– Glamour –
Mientras tanto, Biden esperaba inyectar dinero en efectivo a su campaña.
Las estrellas de Hollywood se unieron a Obama en la velada de gala que ya ha recaudado 28 millones de dólares, según el equipo de campaña de Biden.
«Es la mayor recaudación de fondos demócrata jamás realizada», dijo Clooney.
En los exteriores del acto, grupos de manifestantes que coreaban consignas fueron alejados por policías antidisturbios.
Mientras tanto, Obama subió al escenario con Biden, su ex vicepresidente, para una conversación moderada por el comediante estadounidense Jimmy Kimmel.
«Tenemos alguien de quien preocuparnos», dijo Obama a los donantes al referirse a Trump. «Y hay toda una agenda que debería preocuparnos. Pero podemos enorgullecernos de afirmar el extraordinario trabajo que ha realizado Joe», exclamó.
La aparición de Biden en medio de las estrellas supuso su ausencia en la conferencia internacional de paz sobre Ucrania el sábado en Suiza, a la que asistió la vicepresidenta Kamala Harris.
Biden, de 81 años, ha tenido una reciente racha de agotadores viajes al extranjero centrados en los conflictos en Ucrania y Gaza y esta cita con las estrellas supuso un cambio en su agenda.
En la cumbre de naciones del G7Biden ayudó a sellar un acuerdo para un préstamo de 50 mil millones de dólares para Ucrania utilizando activos rusos congelados y firmó un acuerdo de seguridad de 10 años con Zelenski.
Y la semana anterior estuvo en Normandía, Francia, para el 80º aniversario del desembarco del Día D de la Segunda Guerra Mundial.
Biden se acompañó en la velada de familiares, incluida su hija Ashley y sus nietas Maisy y Naomi. Una muestra de apoyo familiar tras un momento difícil para Biden por la condena esta semana de su hijo Hunter por cargos de posesión de armas.
Las encuestas muestran que Biden y Trump están en gran medida empatados, y muchos votantes están decepcionados por esta revancha entre el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos y un magnate polémico de 78 años y convicto tras un mediático proceso judicial.
Ambos aspirantes han librado una batalla por la recaudación de fondos: Biden logró recaudar más durante varios meses, pero a Trump le ha ido mejor en los últimos tiempos, mientras sus partidarios se unen para apoyarle tras el veredicto de culpabilidad en su juicio por pagar dinero en secreto a una estrella porno para comprar su silencio.
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