Revelan el papel clave de una proteína en el cáncer de endometrio

Un equipo internacional de investigadores ha comprobado en modelos «in vitro» el papel clave y determinante que una proteína tiene en el desarrollo del cáncer de endometrio y en el riesgo de que se produzca metástasis.

Los científicos han comprobado que la baja expresión de una proteína (la C1GALT1) está relacionada con una mayor agresividad de este tipo de cáncer, por lo que su estudio podría facilitar nuevos hallazgos en el manejo de este tipo de tumores.

Los resultados del estudio, que se han validado en muestras de pacientes y que está liderado por Rodrigo Barderas y Ana Montero, de la Unidad Funcional de Investigación en Enfermedades Crónicas del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), se han publicado en la revista Cellular Oncology.

El estudio se ha llevado a cabo de manera conjunta con equipos de la Universidad Complutense de Madrid y el Hospital La Paz, y en mismo han colaborado además investigadores de la Tufts University de Estados Unidos y del Instituto de Salud de Luxemburgo.

El cáncer de endometrio, ha subrayado el ISCIII, es un tumor que representa más de 90% de los cánceres de útero. El pronóstico suele ser positivo, con altas posibilidades de curación, pero algunos subtipos de este cáncer pueden ser graves y causar metástasis.

Las diferentes líneas celulares de cáncer de endometrio son un buen modelo para estudiar «in vitro» la aparición y desarrollo de este tipo de tumores, y en este caso los investigadores han trabajado con un tipo de células (ECC-1) como modelo de cáncer de endometrio de bajo grado, muy utilizadas en investigación biomédica, para investigar en el laboratorio la relación de diversas proteínas con el desarrollo y progresión de este tipo de cáncer.

Los resultados de este estudio permiten aumentar el conocimiento de las alteraciones genéticas y proteicas que podrían ser causantes del cáncer de endometrio.

El Instituto de Salud Carlos III ha subrayado que al tratarse de estudios llevados a cabo en laboratorio, serán necesarias más investigaciones con modelos animales y muestras de tejidos de pacientes para confirmar la asociación entre la expresión baja de esa proteína y el desarrollo de tumores endometriales y el mayor riesgo de fenotipos agresivos ligados a metástasis y peor pronóstico clínico.