Serbia y Grecia avanzan a cuartos en basquetbol olímpico, mientras que EEUU despacha a Puerto Rico
Bogdan Bogdanovic anotó 28 puntos y Serbia doblegó el sábado 96-85 a Sudán del Sur, para sellar su boleto a los cuartos de final del basquetbol olímpico, que ahora se muda a París.
Nikola Jokic añadió 22 unidades y 13 rebotes por los serbios, que terminaron segundos del Grupo C detrás de Estados Unidos. La derrota de la selección sursudanesa implicó que Grecia avanzara con el último pasaje de comodín a la ronda de eliminación directa, en virtud de su mejor diferencia de puntos sobre sus tres adversarios de grupo.
Marial Shayok y Carlik Jones anotaron 17 unidades por cabeza, con lo cual lideraron a Sudán del Sur, que quedó fuera por el criterio de desempate.
«Yo tenía miedo de Sudán del Sur antes del partido. Hizo un gran torneo», dijo Bogdanovic. «Mis respetos para ellos. Los conocíamos desde el Mundial pero han mejorado mucho».
Luol Deng, presidente de la federación de Sudán del Sur, así como el entrenador Royal Ivey, criticaron el trabajo arbitral. Ivey consideró que las decisiones fueron parciales en contra de su equipo, con una gran discrepancia en los criterios para marcar faltas.
«Miren los tiros libres, antes que nada. ¿Ellos hicieron 31 y nosotros seis?», preguntó Ivey. «Hay que contar esta historia, la historia real, porque esto es un espejismo. ¿Cómo hicieron ellos 31 tiros libres y nosotros seis? ¿Cómo?».
A lo largo del partido, Sudán del Sur luchó por su vida. Sus jugadores se lanzaron al piso en busca de balones perdidos y le cayeron encima a Jokic cada vez que avanzó con el balón.
Hubo también buenas jugadas colectivas, como un sprint de Wenyen Gabriel para una tapa contra Aleksa Avramovic, durante un acelerado primer cuarto.
La ventaja de Serbia siguió en un solo dígito en el tercer periodo. Pero los balcánicos encontraron algo de ritmo luego de una pausa y tomaron una delantera de 65-58 con triples seguidos de Bogdanovic.
Con menos de tres minutos restantes, Serbia tomó una ventaja de 91-74.
En el punto medio de su campaña por otro oro olímpico, Estados Unidos se aseguró ser el máximo preclasificado en la fase final.
Ahora es cuando empezarán los partidos más fuertes.
Anthony Edwards firmó 26 puntos, seis jugadores alcanzaron doble dígitos y los estadounidenses quedaron como el mejor equipo de la fase de grupos al doblegar 104-83 a Puerto Rico.
«Creo que cumplimos lo que nos propusimos, ganar los tres partidos y asegurar el primer puesto», dijo el entrenador estadounidense Steve Kerr. «Sabemos que tendremos que mejorar. Es un torneo que se pone más difícil etapa tras etapa. Nuestro objetivo es mejorar partido a partido».
Los estadounidenses — con foja de 3-0 en estos Juegos y 8-0 durante todo el verano — chocarán contra Brasil en los cuartos de final en París el martes.
«Tendremos que estar bien alertas», avisó el delantero LeBron James.
Joel Embiid aportó 15 puntos y Kevin Durant añadió 11, con lo que quedó a cinco unidades de igualar a Lisa Leslie como el máximo anotador de Estados Unidos en ambas ramas en los Juegos. Durant suma 483; y Leslie finalizó su carrera con 488.
James cerró con 10 puntos, ocho asistencias y seis rebotes en 18 minutos. Jayson Tatum y Anthony Davis registraron 10 cada uno por esta nueva versión del Dream Team.
José Alvarado lideró a Puerto Rico (0-3) con 18 puntos.
Fue el primer enfrentamiento en unos Juegos entre estas dos naciones desde los Juegos de Atenas en 2004, cuando Puerto Rico arrasó en el segundo cuarto y le propinó una humillante derrota 92-73 a Estados Unidos, en el que el fue el primer torneo olímpico de James.
La historia fue distinta esta vez.
Ese día en Atenas, Puerto Rico ganó el segundo cuarto por 28-7. Esta vez, Estados Unidos se lo llevó por 39-16.
Pero hay que darles crédito a los boricuas, un equipo que se presentó a jugar sabiendo que estaba eliminado de antemano. Llegaron a sacar una ventaja de ocho puntos en las postrimerías del primer cuarto y ganaban 37-36 con 5:45 por jugar en la parte complementaria.
El resto de la mitad: Estados Unidos 28, Puerto Rico. Eso fulminó a los boricuas.