Viceministro: Barrick piensa generar 700 mil onzas (de oro); con eso, la caída que tuvimos este año se recupera
Las exportaciones mineras siguen a la baja. En los primeros cinco meses del año, las de oro y plata decrecieron 9.85 % en comparación con enero-mayo del 2022. ¿Para cuándo mejorarían?
La respuesta la estima el ingeniero geólogo y viceministro de Minas, Miguel Díaz, en una entrevista con Diario Libre, en la que también responde por qué a este sector se le presentan tantas trabas para su desarrollo.
—¿Cómo está contribuyendo la minería a la economía en el actual contexto inflacionario?
Durante la pandemia se tuvo que cerrar la economía y, en ese particular contexto, fue la minería que produjo los impuestos adicionales que nos permitieron comprar la vacunas. Y, como resultado de esa compra de las vacunas, pudimos reabrir la economía en el 2021 y fuimos uno de los primeros países del mundo que pudimos decirles a los turistas: vengan (…)
«Las vacunas se compran en efectivo, y ese año 2020 el sector minero generó, entre los impuestos adicionales y los anticipos, un exceso de 14,000 millones de pesos, y el costo del programa de salud contra el covid costó 15,000 millones, o sea que prácticamente el sector minero cubrió ese asunto «
Miguel Díaz
Viceministro de Minas
El 24 de febrero del 2022, cuando Rusia decide invadir a Ucrania, es una guerra que dispara los precios del petróleo inmediatamente y, al mismo tiempo, dispara el precio del oro. En este caso, de nuevo, a pesar de que la producción del oro estaba ya bajando, debido al aumento del precio, generamos suficientes recursos para amortiguar ese problema.
Y tenemos ahora, en un futuro, la transición energética. Sabemos que la transición energética no es factible sin aumentar la minería.
—¿Por qué?
Porque la movilidad eléctrica, lo renovable, todo depende de una serie de minerales.
—¿A qué se atribuye la baja en las exportaciones mineras?
En el 2020, ya la razón principal es la baja en la producción del oro. El año pasado la producción bajó a 600,000 onzas, el antepasado eran 700,000 y hace dos años estaba en 800,000 (…) Para tú sostener la producción en 800,000 onzas se necesitan dos cosas. (Una es) poder procesar más material (…) y eso te genera más desechos.
—¿Por eso es que entra ahí la presa de colas de Barrick Pueblo Viejo?
Exactamente.
—De hecho, ya se le dio la licencia ambiental
Ellos solicitaron eso en el 2019, pero por razones que no entendemos, no se progresó. Entonces, cuando nosotros llegamos aquí en el 2020, es uno de los problemas que teníamos para resolver. Fuimos, visitamos las comunidades y estuvimos mirando, y realmente eso nos trae a uno de los problemas más serios que tenemos en la República Dominicana.
Nosotros somos un país que depende de la minería, pero no conocemos la minería. Entonces, cuando tú tratas de explicarle a la gente los beneficios y problemas asociados con un proyecto, a veces hay prejuicios que han sido construidos en base a emociones que evitan que las personas balanceen el proyecto.
—¿El tiempo que se ha tomado para que la Barrick llegue a donde está con la presa de colas es lo normal en un proceso minero de este calibre o le ha afectado la campaña de oposición?
La minería es controversial en todas las partes del mundo. Hay alrededor de 83 proyectos parados en Latinoamérica por problemas. Y parte del problema está en que realmente, hasta ahora, a veces la industria no ha sido muy buena en comunicarse con las comunidades.
Entonces, esa falta de comunicación ha sido explotada por gente que tampoco conoce de la minería, pero que ha oído cosas del pasado de que la minería es dañina.
—¿Cree que eso es lo que está pasando con el proyecto Romero en San Juan?
Si vas a las comunidades que están alrededor del proyecto Romero, ellos están 100 por ciento apoyando que se haga el estudio de impacto ambiental y social.
Permiso para Romero
—¿Y por qué el gobierno no termina de darle el permiso para hacer ese estudio?
El problema es que yo te puedo dar un permiso a ti, pero si las personas que tienen cierto movimiento van a evitar que eso ocurra (…) Llevamos dos años explicando eso (que es un permiso para un estudio) y finalmente creo que estamos en un punto de que el pueblo de San Juan -no la gente que está allá arriba alrededor del proyecto- comprendan que el estudio de impacto ambiental es un estudio que nos permite a nosotros tomar decisiones.
—Para que el presidente de la República autorice ese estudio, ¿la gente tiene que estar toda a favor?
No.
—¿No puede el presidente por su capacidad de Estado imponerse a esas críticas y ordenar esto?
Recuerda que somos un país democrático y que tratamos de explicarle a la gente el porqué de las decisiones, porque a veces son decisiones muy controversiales y podrían traer eventos que tendrían consecuencias serias.
—Entonces, ¿cómo puede decir que está ahora esa solicitud?
Estamos muy avanzados en ese permiso. Diría que es un proceso que tenemos que seguir dialogando con las comunidades en San Juan, explicando sobre la minería. Yo mismo he ido a varias presentaciones.
—Hubo un medio canadiense que publicó un artículo diciendo que el senador Félix Bautista bloquea ese proyecto. ¿Él tiene tanto poder de cerrarle las puertas?
Es parte del problema, pero también hay otras personas. Recuérdate que por muchos años aquí se se satanizó la industria minera. Había una percepción de que todos los proyectos mineros destruían el medioambiente, de que si tú aprobabas un proyecto minero, ibas a destruir el agua y recuérdate que la localización de este proyecto está arriba de una presa entonce es muy fácil, tú no explicarle a la gente los beneficios del proyecto y las tecnologías que hoy existen para evitar un impacto ambiental.